OCHO HORAS ...http://julio-escrituracreativa.blogspot.com.ar/

En el borrador del escrito de ayer, alguien de los que imagino que se  mueven con linterna en los entresijos oscuros de internet  tachó   lo de que el viaje que nos llevó  desde León a Cangas del Narcea tardó unas ocho horas, aunque no lo excluyó en el texto publicado.Es comprensible que pensara en un error por mi parte, porque la distancia que separa a estas dos poblaciones debe rondar los ciento cincuenta kilómetros.  Me atrevo a asegurar que quien lo hizo fue alguien que nació mucho más tarde que yo, y no pudo imaginar una velocidad media .de 20 kilómetros a la hora. Debo aclarar, por una parte, que hicimos una larga parada en el trayecto a mediodía -en Vllablino, si la memoria no me traiciona- para estirar las piernas y comer el bocadillo de tortilla  y poco más,  que nuestras madres, previsoras, nos habrían preparado al conocer el tiempo excesivo del viaje. Pero  está claro  que  quien consideró equivocada esa velocidad de tortuga, no se pudo imaginar cómo eran las carreteras de aquellos tiempos, estrechas, serpenteantes en montaña y  bien surtidas de profundos baches. Por otra parte, los autobuses de entonces eran todos viejos, que parecía que ya los fabricaban cargados de años, y no soportaban marchas aceleradas.Tenían una salud muy deficiente y  se negaban a funcionar cada dos por tres.Y recuerdo que, en el recorrido, nos encontramos con una vaca en plena carretera que no tenía espacio para apartarse y corrió no sé cuantos kilómetros delante,  hasta un lugar en que pudo apartarse, al borde del infarto. Tampoco me olvidé de un viaje que hice en tren de León a Barcelona en los años setenta, que duró 24 horas.Y es que,   para quienes no vivieron aquellos tiempos,  resulta imposible que se hagan idea de aquella realidad. Lo tengo dicho más de una vez.