Cinco grandes estrellas del cine que incursionaron en la dirección

Ante el estreno del debut de Russell Crowe detrás de las cámaras

Actores-directores hay muchos, ya Charles Chaplin y Buster Keaton lo hacían hace un siglo. Pero esta selección es de otro estilo, es de actores que ya eran grandes estrellas cuando decidieron dirigir su primera película. Con la excusa, claro, de Camino a Estambul del grandote Russell Crowe.
Camino a Estambul en el original es The Water Diviner, y no hay que ser muy sagaz para saber que el título en Argentina está relacionado con el actual éxito de la novela turca Las mil y una noches. De todos modos, Estambul sí es importante en el relato. También es importante, por supuesto, la presencia de Russell Crowe, que hace de un personaje noble, valiente, padre abnegado, amante esposo, defensor de débiles, leal, y que se muestra fuerte y robusto pero esquiva, en un montaje muy llamativo, mostrar su panza pero no evita mostrar hombros y espalda completa. La película es una épica histórica de estilo clásico o quizás antiguo, según el gusto del espectador:

Cuando dirigió Braveheart, es decir Corazón valiente, Mel Gibson ya se había dirigido a sí mismo en El hombre sin rostro. Pero con Corazón valiente hizo su épica histórica e interpretó al personaje valiente, corajudo, justiciero, amante esposo y luchador por la libertad, el leal héroe escocés William Wallace. El señor Gibson demostraba que podía filmar batallas y movimientos como pocos otros directores, y lo volvería a probar en Apocalypto.

Es uno de los actores de mayor estirpe clásica, y uno de los pocos que saben hacer hoy en día un western. Pacto de justicia - Open Range es una de las películas clave del siglo XXI pero no anduvo muy bien. Su película anterior, El mensajero, fue un tremendo fracaso comercial. Pero su ópera prima fue un éxito mundial y además ganó el Oscar. Sí, Danza con lobos y Kevin Costner, una épica histórica en la que el personaje de Costner era noble, aventurero, leal, taciturno pero seductor y amigo de los indios.

Otro actor de estirpe clásica -el mayor- y otro que sabe hacer westerns -quizás el que más sepa de todos- es, claro, el señor que supo dirigir a Costner en Un mundo perfecto. Y el que cuando ya era toda una estrella se lanzó a dirigir en 1971, un thriller de obsesiones, una especie de precursora de Atracción fatal. El objeto del deseo era, claro, él mismo como disc jockey seductor. El señor Clint Eastwood hizo su debut como director en Play Misty for Me,aquí llamada -no es joda- Obsesión mortal:

Podríamos terminar con un actor que en su primera película como director no se dirigió a sí mismo sino a su hermano, como fue el caso de Ben Affleck en Gone Baby Gone (luego sí se dirigiría a sí mismo). Pero no podemos evitar la tentación de destacar la única película dirigida por Steven Seagal: On Deadly Ground, es decir Territorio salvaje, una película de acción en Alaska, contra las malvadas corporaciones del petróleo. El malo es Michael Caine, con el pelo renegrido de forma espectacular. Y el bueno, noble, ecológico (aunque vuela todo por el aire), místico, seductor, copado y con camisas de no creer es Steven Seagal.

Por Javier Porta Fouz

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