Cómo será el nuevo Conservatorio de Música
Tendrá un anfiteatro para 300 personas, aulas para todos los instrumentos, biblioteca, entre otros espacios. Qué quieren los alumnos.
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ENTRADA. Imagen proyectual de cómo quedará la fachada del Conservatorio: el predio estará cercado.
“Pedir que el Conservatorio tenga instrumentos ¿es mucho?”, se preguntó Nahuel Velázquez cuando se le consultó qué desearía que cambie en la institución donde estudia guitarra. A ello agregó que el mantenimiento casi no existe y que el edificio necesita urgentes refacciones. Nazarena Seguir, con el violín en mano, dijo que sueña con tener una biblioteca y una escalera de mármol con antideslizantes, que quizás se podrían concretar con la inversión que hará el Gobierno provincial de $ 90 millones en la refacción general, adecuación y ampliación del Conservatorio de Música. “Seguro los futuros alumnos podrán disfrutar de esas nuevas aulas”, dijo la joven estudiante, que se enteró del anuncio ayer por la mañana.
Según detallaron en la presentación del proyecto, en la que estuvieron presentes el gobernador, Juan Manzur, y el ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer, en unos 18 meses se concretará la obra, luego del proceso licitatorio que comenzará en el corto plazo. El objetivo -según la propuesta expuesta- es recuperar el edificio original y agruparlo con el entorno, recuperar la fachada, hacer un cerramiento y reforestación del predio; con nuevo estacionamiento cerrado, modernas luminarias, nueva área administrativa, nueva instalación eléctrica, patio interno y un auditorio con capacidad para 300 personas que se conectará mediante una rampa con el edificio del conservatorio. Además, contempla nuevos patios externos con mobiliario urbano, seis aulas grupales, una biblioteca, un espacio de guardado de instrumentos, dos aulas de viento, un aula de percusión, seis aulas de cuerdas, cinco de piano, una de piano eléctrico y una sala de expresión corporal.
Soledad Sánchez, arquitecta y autora del proyecto, contó que el primer desafío es adecuarlo para la nueva función que cumple actualmente, pero -sobre todo- mantener el lenguaje propio del edificio y su conservación. “Primero fue un aeropuerto, luego una escuela, y hoy es un conservatorio que no tiene la adecuación lista para esas actividades. La ampliación y el tratamiento que se le dará a la superficie tendrá una continuidad con el edificio actual, pero con técnicas constructivas modernas. Cumpliremos con los requerimientos que necesita un espacio que se dedica a la enseñanza de la música”, añadió la profesional.
Que se cumpla
La actual directora del Conservatorio, Gabriela Canevaro, ya estaba enterada del proyecto, que de hecho se reelaboró con las necesidades que expresaron docentes y alumnos, teniendo como base un proyecto de la anterior gestión. “Estoy muy contenta de que se cumpla a no tan largo plazo. Entiendo que un proyecto así lleva tiempo. Pero hay que tener esperanzas de que esta promesa se cumpla. Hay que luchar para que esto no quede en la nada. Porque hay docentes que están desanimados, ya que desde otros gobiernos les venían haciendo promesas de obras que no se cumplieron”, comentó.
Canevaro se confesó optimista ya que desde que inició su gestión hace un año y medio se han hecho inversiones en cuestiones básicas, como la seguridad. “Ahora tenemos tres policías de la patrulla urbana todos los días. Han invertido $ 350.000 para arreglos menores, se colocó material desplegado en las ventanas y una nueva puerta en el fondo. La semana que viene arreglarán los baños avejentados. Las promesas que yo escuché desde el año pasado se están concretando”, resaltó.
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