Matías Desiderio, el villano de "Simona" que llegó a Hollywood y prepara una película con Charlie Sheen: "Nos hicimos amigos"
"Ahora estoy viviendo un muy buen momento, pero pasé por etapas en las que no tenía trabajo. Me costó y me esforcé mucho para llegar adonde estoy. Me toca porque estuve en varios lugares. Es parte de la lucha".
Matías Desiderio, que interpreta a Mauro, el villano de Simona, le cuenta a Teleshow su historia de vida, que incluye anécdotas con Charlie Sheen, Jean-Claude Van Damme, Al Pacino, Halle Berry y otras estrellas internacionales, con quienes compartió distintos momentos en Los Ángeles, donde triunfa como actor de cine, teatro, televisión y comerciales.
En Buenos Aires fui repartidor de pizza, cajero y vendedor en un local; esos trabajos me dieron herramientas que me ayudaron en mi rol de actor
Todo comenzó en 2007 cuando viajó por primera vez a California para presentar en un festival de cine la película Palermo Hollywood, en la que interpretó a Pablo. "Ahí tuve el primer contacto con quien después fue mi representante en Los Ángeles. Y de a poco se me empezaron a abrir puertas".
Ser "uno más" entre las estrellas de Hollywood
Desiderio comenzó a estudiar actuación a los 17 años. Un año después, a la vez que hacía sus primeros trabajos como modelo, debutó sobre el escenario en Vengo por el aviso, un ciclo de Teatro por la Identidad para Abuelas de Plaza de Mayo.
Soy socio y amigo de Charlie Sheen
Además de español, habla inglés, portugués e italiano. Se instruyó con El Indio Romero, luego en el Teatro San Martín y también en la academia Actors Studio de Los Ángeles. Entre 2010 y 2012 -no recuerda el año con precisión- se instaló en Estados Unidos. Allí hizo la obra teatral Crazy like me (Loco como yo), las series CSI Miami, CSI New York, entre otras, y el filme In the name of street (En el nombre de la calle).
Además de películas, obras teatrales, series y cortometrajes, protagonizó comerciales con grandes estrellas internacionales como Sofía Vergara. "Como actor, no me siento parte de nada. Solo me siento parte de cada proyecto que voy haciendo. Cuando lo conocí a Charlie Sheen sentí admiración, pero después te das cuenta de que es una persona como todos", asegura.
La amistad con Charlie Sheen, su cumpleaños con Al Pacino y un encuentro con Halle Berry
Según cuenta, Matías conoció Charlie Sheen en un festival de cine y comenzó un vínculo a través de una persona en común. "Con el tiempo nos hicimos amigos. Lo que cambia es el escenario, pero las relaciones humanas son prácticamente las mismas en Los Ángeles y en todos lados", sostiene sobre su relación con las estrellas internacionales.
Si bien planea su 2018 en Argentina por su presente en Simona y sus ganas de hacer teatro, Matías ya está pensando en los proyectos para el 2019. "Hay una tentativa para hacer cine, pero no puedo adelantar mucho más", anticipa el actor y socio de Sheen.
Cuando no tuve trabajo como actor en Los Ángeles, fui mesero, bartender y barman
"También conocí a Jean-Claude Van Damme porque trabajé con su hija en un cortometraje -cuenta-. Eso es lo bueno que propone Los Ángeles. Es un círculo muy chico y están los actores que estamos acostumbrados a ver en series y películas. Cuando uno empieza a pertenecer a esa industria, se encuentra con todos".
Tal como relata el actor que aquí fue parte de Fronteras, Los Únicos, Malandras, Doble vida y Camino al amor, el hecho de trabajar en Hollywood le dejó recuerdos como el cumpleaños que celebró junto a Al Pacino, entre otros invitados.
Yo me adapto a cualquier circunstancia; puedo ser rico entre los ricos y pobre entre los pobres
"Justó cayó el mismo día en que celebramos Acción de Gracias en la casa de un amigo que también es cercano de Lucila Polak -la argentina, novia del protagonista de Perfume de mujer–, entonces vino con él. De repente me encontré con Al Pacino saludándome por mi cumpleaños. ¡Fue una cosa loquísima!".
A diferencia de lo que sucede en Argentina, en Los Ángeles -reitera- es normal encontrarse con famosos en la calle: "Allá, la gente está acostumbrada a cruzarse a Johnny Depp eligiendo una manteca en el supermercado. De hecho, a mí me pasó que me encontré a Halle Berry, que estaba comprando cosas, y nadie le decía nada. Si hay un turista quizás sí se acerca y le pide una foto".
"Me ha pasado de ver a actores muy famosos comiendo en algún lado", continúa quien no se declara fanático: "Ya me resulta normal".
De la zona oeste de Buenos Aires a Los Ángeles y sus amigos del barrio, los de siempre
Durante su infancia en Buenos Aires, Matías -que también vivió en Brasil un año, trabajando como modelo- pasó por distintos barrio de la zona oeste.
"Crecimos en Caballito, después nos mudamos a Flores, Mataderos y Villa Luro", cuenta quien tiene otro hermano, cinco hermanas y 13 sobrinos, y un hijo de 14 años que viaja "todo el tiempo" a verlo a Los Ángeles. "Igual, yo vengo mucho para acá. Nunca pierdo el contacto con mi familia", aclara.
En Hollywood pasan loquísimas; un día me encontré festejando mi cumpleaños con Al Pacino
Es así como, además, el actor de 38 años cuenta que tiene "amigos de todos los barrios" y destaca su capacidad de "adaptarse" a cualquier clase social: "Puedo ser rico entre los ricos y pobre entre los pobres".
Entre su grupo de amigos, y también para su familia, es lo mismo que trabaje en Hollywood o en otro rubro, como lo ha hecho en otro momento de su vida: "Lo toman con mucha admiración y me felicitan, pero no hablamos de trabajo. Cada uno es quien es, y si a uno le va bien, nos felicitamos mutuamente".
"Trato de no perder la humildad. Sinceramente, siento que es un trabajo como cualquiera.Trato de vivirlo de esa manera. Jamás me paro en un lugar diferente por lo que hago y trato de que no me lo hagan sentir", continúa Matías, quien en la ficción de Pol-ka interpreta al padre de los personajes de Gastón Soffritti, Agustín Casanova y Renato Quattordio.
De vendedor en un local a triunfar en Hollywood, la lucha de Matías Desiderio
El actor, que hoy vive un gran presente, destaca que a lo largo de su vida pasó por distintas etapas y que, incluso, ha tenido que desempeñarse en otros trabajos cuando no conseguía una oportunidad en su rubro.
En Los Ángeles es muy común encontrarte con famosos en la calle; yo me crucé a Halle Berry en un supermercado
"Hice de todo tanto en Buenos Aires como en Los Ángeles. Repartí pizzas, trabajé de cajero, fui vendedor en un local de ropa. Incluso después de haber debutado como actor. Lo hacía para mantenerme porque, al principio, no hay trabajo todo el tiempo".
"Cuando me fui, me pasó lo mismo. Cuando arranqué, no tenía laburo constantemente, así que fui bartender, barman y barman y mesero. Mi objetivo era actuar pero necesitaba tener un ingreso y esos trabajos fueron parte del camino, como nos pasa a todos", continúa.
Desiderio explica que volvería a "trabajar de cualquier cosa" si lo necesitara. "Lo haría con mucho orgullo y no lo dudaría. Siempre con la ilusión de volver a trabajar de lo que amo, por supuesto".
"De hecho, esos trabajos fueron los que me dieron más herramientas para mi faceta de actor. El hecho de poder adaptarme a cualquier circunstancia. Al igual que el haber pasado por muchos barrios y colegios a los que me cambiaban cuando era chico porque nos mudábamos", finaliza Matías Desiderio la entrevista exclusiva con Teleshow.
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