Cinco grandes musicales del siglo XXI
De Moulin Rouge a la nueva Pitch Perfect
No es tan fácil encontrar películas musicales en el siglo XXI. Hay pocas, y entre ellas hay casos que no lo son del todo si se aplican las reglas más estrictas del género. El éxito, sobre todo en los Estados Unidos, de las dos Pitch Perfect (y ya está anunciada la tercera), acá tituladas Ritmo perfecto y Más notas perfectas, quizás impulse una mayor presencia del género, o de estos ejemplos intermedios, en la frontera, que tienen muchas canciones y bailes pero que carecen, u ofrecen pocas, de esas situaciones musicales que emergen "de la nada", como pasaba en el género en su forma clásica y en su época de oro, hace aproximadamente 70 años.
Empezamos este listado con el trailer del estreno de esta semana, Pitch Perfect 2, o sea Más notas perfectas, dirigida por la actriz Elizabeth Banks:
Vamos a principios de siglo, y ahí tenemos dos musicales muy famosos, presentados en Cannes. Uno es Bailarina en la oscuridad de Lars von Trier, que habría que ver si realmente pertenece al siglo XXI (es del año 2000) y además fue uno de esos ejemplos limítrofes. El otro musical de esa época, y el que vamos a elegir para destacar es Moulin Rouge! de Baz Luhrmann, que renovó el género y tuvo una osadía tremenda para su mashup pop. Además, Nicole Kidman y Ewan McGregor probablemente hayan estado en su mayor estado de gracia en esta película.
Claro, el final de Moulin Rouge!, entre otras características, nos decían con claridad que no se trataba de un musical clásico. Con mucho mayor clasicismo, Clint Eastwood incursionó hace poco en el musical con su biografía de Frankie Valli & the Four Seasons. Pero la excelente película del maestro era más bien un relato con muchas canciones, que mostraba cómo podía volverse un musical de pleno derecho en su secuencia final, sobre los créditos.
Uno de los musicales más extravagantes de este siglo es sin duda alguna la aventura del prolífico director japonés de culto Miike Takashi, que en The Happiness of the Katakuris(2001) cruzó el terror con el musical, la sangre en modo gore japonés con coreografías de Hollywood y planos de familia en la montaña como de La novicia rebelde. Ver para creer:
Había supuestamente pocos y ahora hay varios candidatos para cerrar este listado.¿Hairspray modelo 2007? No, es mucho mejor la original de John Waters de los ochenta, que era menos estrictemente musical. ¿Chicago? No, mejor no. Hay una película independiente poco conocida llamada Colma the Musical y que se recomienda buscarla. Pero vamos a dejar esas y otras de lado para cerrar con una película reciente también protagonizada, como las dos Pitch Perfect, por Anna Kendrick. Y no, no es En el bosque, esa es del mismo director deChicago. Hablamos de otra, es un musical de separación que dirigió Richard Lagravenese -es decir, el señor guionista de Los puentes de Madison- y que se llama The Last Five Years.
Por Javier Porta Fouz
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