El Colón es una belleza loca

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Martha Argerich sumó una presentación y Barenboim hará una función gratuita con la Orquesta West-Eastern Divan. Se anunció hoy en una conferencia de prensa en el Teatro Colón.

Barenboim, Darío Lopérfido y Martha Argerich en la conferencia de prensa. (Néstor Sieira)

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• Federico Monjeau
• Crítico musical

Martha Argerich y Daniel Barenboim dieron hoy por la tarde una conferencia de prensa en el Colón, a pocos días del inicio del Festival Barenboim 2015, que abrirá el viernes con un concierto en el teatro de la Orquesta West-Eastern Divan. Lo dirigirá Barenboim en obras de Richard Wagner, Arnold Schoenberg y Pierre Boulez.

La charla con la prensa fue introducida por Darío Lopérfido, quien habló "como director del Teatro Colón y como fan", y calificó a Martha Argerich y Daniel Barenboim como "los dos argentinos más importantes de la actualidad". En ese momento la pianista hizo uno de sus característicos mohínes, y a su turno se declaró "felícísima de tocar en este Festival" y se permitió corregir el señalamiento de Lopérfido: "Se olvidó del Papa Francisco". "Bueno -admitió el director del Colón-, si tuviera que elegir a los tres más importantes, diría que son ustedes y Francisco". Y entonces Barenboim cerró el párrafo con otra nota de realismo: "Pobre Messi".

En un clima cálido y distendido, los músicos hablaron (Argerich, desde luego, en su espontaneidad minimalista) sobre las características del Festival, sobre el repertorio seleccionado, sobre las cualidades del Teatro Colón. Barenboim recordó una carta que Wilhelm Furtwängler le mandó a su colega Sergiu Celeibidache tras dirigir La Pasión según San Mateo de Bach en el Colón después de la Segunda Guerra, instándolo a que viajase a Buenos Aires para conocer ese teatro de acústica milagrosa. Argerich agregó: "No existe un teatro igual en el mundo, y además en el escenario se siente intimidad. ¡Es una belleza loca!"

Barenboim destacó la dicha de volver a tocar con la Argerich y la prioridad que tiene para él dar a conocer obras del repertorio contemporáneo, como ahora Sur Incices en el 90 aniversario del autor, Pierre Boulez. "Es una obra que desarrolla la sonoridad a un punto extremo: se basa en las diferencias de reverberación de distintos instrumentos y crea un efecto de música electrónica sin que medie ningún elemento electrónico. A los que piensan que no entienden la música contemporánea, me gustaría decirles que esta obra es en verdad muy accesible, mucho más que otras del autor".

También se habló del nuevo piano "Barenboim", que como ya se ha señalado vuelve a emplear el encordado paralelo que los pianos dejaron de usar en 1875, pero con todos los medios tecnológicos y los materiales del piano moderno. Hasta ahora Barenboim lo empleó con las sonatas de Franz Schubert. "Estoy curioso por ver cómo reacciona en este otro repertorio, pero no exageremos con las peculiaridades de este piano. No vengan a ecuchar el piano, vengan a escucharme a mí".

En este punto, Argerich agregó su habitual y deliciosa dosis de misterio: "A lo mejor en el Concierto N° 2 de Beethoven pruebo con el piano de Barenboim. Ya lo probé un poquito en París. A lo mejor lo hago, pero no sé".

Sobre el final de la conferencia el director de orquesta Guillermo Scarabino le preguntó a Barenboim cuándo descansa. "Llegué el jueves de unas vacaciones -aclaró el músico-, pero de todas maneras a mí la música me da energía. No siempre necesito descansar. Es algo que trato de explicárselo a mi cuerpo, que no siempre me entiende. De todas formas, debo decir que dejé la dirección de la Scala de Milán para viajar menos y poder dedicarme mejor a la Academia que abriremos el año que viene en Berlín (destinada a jóvenes músicos árabes e israelíes y ubicada en el edificio de la Staatsoper)".

Luego cerró con una oportuna anécdota del violinista Mischa Elman cuando celebró sus 75 años años con un concierto en Nueva York. Ese concierto celebraba a su vez el 70 aniversario de su primer recital público, que dio con sólo cinco años. Un periodista del New York Times quiso saber lo que a su juicio había cambiado en sus 70 años de carrera. "Prácticamente nada- contestó Elman-. Tanto entonces como ahora la gente dice que toco muy bien para mi edad". Risueño, Barenboim remató: "Espero no llegar a ese punto".

Concierto gratis y una actuación más de Argerich

La conferencia incluyó dos novedades respecto de la programación anunciada originalmente. La primera es que Argerich agregó una tercera presentación. El sábado 25 se sumará al segundo concierto de la orquesta en el Colón, para  un programa a dos pianos con Barenboim, con los Seis estudios canónicos de Schumann y la Suite En blanco y negro de Debussy. Este programa en cierta forma anticipa el concierto a dos pianos del domingo a las 17, que además de esas obras incluirá la Sonata para dos pianos y percusión de Bartok. La segunda novedad es que la Orquesta del Divan, dirigida por Barenboim, dará una función gratuita exclusiva para estudiantes en el Colón el sábado 8 a las 12, con el Triple concierto de Beethoven y Pelleas y Melisande de Schoenberg.