¿Peligra la temporada teatral? Actores vs. empresarios por una ley


Fuerte conflicto.
La implementación de la Ley del actor ubica en veredas opuestas a los empresarios teatrales y el gremio de actores. El conflicto hace peligrar la inminente temporada de verano.

Hoy al mediodía se realizó en el teatro El Nacional una conferencia de prensa de la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales (AADET) sobre las repercusiones que tendría en el sector privado la implementación de la ley del actor, aprobada por el Congreso de la Nación el 28 de octubre (ver comunicado AADET)  Fueron oradores Sebastían Blutrach (presidente de AADET), Pablo Kompel, Carlos Rottemberg, Ignacio Laviaguerre y Diego Romay.
Aunque la convocatoria fue para “la comunidad interesada en la actividad teatral”, participaron pocos fuera del ámbito empresarial. Solo un puñado de actores: Arturo Puig, Selva Alemán, Gabriel Goity, Luis Brandoni. También estuvo representada ARTEI, una de las asociaciones que agrupa la actividad del circuito alternativo, y que organiza un premio que consiste en la producción de obras del off financiadas por AADET.
Hay aspectos de la ley que, según los empresarios, cambiarían los costos de producción y dificultarían el desarrollo de la actividad a corto plazo. Carlos Rottemberg fue claro: “lo que antes se arreglaba de común acuerdo entre los actores y nosotros, ahora implica un nuevo socio: el Estado que se lleva cerca del 40 %”. Esta variación, señalan, se comenzará a sentir en la próxima temporada verano que ya está en marcha y comienza, en Mar del Plata, el próximo viernes. Aunque ya se firmaron contratos de espectáculos que serán estrenados en las plazas veraniegas, en algunos casos se incorporó una clausula que obliga a rever los términos una vez que entre en funcionamiento la ley (se calcula febrero de 2016). ARTEI se plegó diciendo que la ley “pone seriamente en riesgo al teatro autogestivo.”
Una de las conquistas de la ley es la jubilación de los actores. Dadas las características de la actividad, con actores rotando por diferentes elencos, se establece, por ejemplo, que 120 días de trabajo en continuo corresponden a un año de aporte. En este caso, AADET argumentó que al cambiar las categorizaciones de los trabajadores (que deberán inscribirse en relación de dependencia o como autónomos) no se contemplan situaciones propias del sector. Lo habitual, señalaron, es que las figuras que encabezan elencos obtengan un porcentaje de la ganancia total de un espectáculo, previo acuerdo privado con los productores. Vale recordar que la actividad teatral no paga IVA, tampoco impuesto a las ganancias.
La Asociación Argentina de Actores (A. A. A) no envió representantes. Para esta nota se los contactó, Susana Varela, responsable de prensa, afirmó que no brindaron declaraciones. Prefirieron, en cambio, hacer público hace unas horas un comunicado titulado “La ley del actor y la doble moral empresaria”. Allí señalan: “Mienten. Si hay patrón, hay obligación de pagar sueldo, de registrar al trabajador y de pagar obra social y jubilación. Sin embargo, los empresarios teatrales y los de las demás ramas de la actuación, han sido privilegiados hato hoy porque nadie les exigió nunca que cumplieran con estas obligaciones.” La discusión está abierta. Por lo pronto, el jueves AADET se reunirá con el Ministerio de Trabajo. 

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