Cómo era Darín antes de ser Darín El actor cumplió ayer 58 años. Y el canal pone sus filmes “Lado B”.

Ricardo Darín de joven, cuando todo comenzaba

Ahora es fácil porque Ricardo Darín es garantía de un millón de espectadores, mínimo, por más que haga de muerto, pero hubo un tiempo -que no se sabe si fue hermoso o qué- en el que Ricardo Darín era un ganapán desenfrenado, además de un galancito (también desenfrenado). Esos tiempos de cine, cancherismo y fundamentales ojos claros fue el evidente punto de partida para una carrera que no parece tener techo a la vista.

 Esa es la época que el Canal Volver eligió para celebrar en continuado la Era Darín y algo más: su cumpleaños número 58 (fue ayer). Así, a partir de las 13, la señal presentará una maratón de Lados B con una selección de memorables películas. 

Primero será con He nacido en la ribera, una película de 1972 que narra la vida de un joven que se prepara para ser jugador de fútbol. La historia cuenta que un joven de apellido Notari llega a ser profesional y juega en Primera División en el club “Del Plata”. En este caso la acción se sitúa en el barrio de La Boca, y en el afiche promocional de la película -donde ya destacan los nombres de Susana Giménez, Arturo Puig, Gino Renni y Santiago Bal-  el del adolescente Darín ni siquiera  figura en el reparto. ¿Será cuestión de descubrirlo entre los futbolistas de ficción? La dirección de la película fue de Catrano Catrani, un director de cine y productor ítaloargentino.

Luego llegará el turno de La Rosales, junto a Héctor Alterio y Alicia Bruzzo. La historia, basada en hechos reales, nos sitúa en Uruguay, 1892. La torpedera de la Armada Argentina, bautizada como La Rosales, naufraga y sobreviven sólo el capitán y los oficiales. La gran mayoría de los tripulantes no tuvieron tanta suerte. A continuación, y para cerrar el homenaje, llega La fiesta de todos, dirigida por Sergio Renán, con Juan Carlos Calabró, Luis Landriscina, Julio de Grazia, Félix Luna, César Luis Menotti, José María Muñoz, Luis Sandrini y el propio Darín. El argumento del controvertido largometraje gira en torno a una suerte de reconstrucción documental sobre la victoria argentina en el Mundial ‘78, donde también participan importantes personalidades del mundo de la cultura.