Diana Ingro: adiós a una rubia del cine de oro
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Tenía 99 años. Participó de más de 30 películas. Se había iniciado como extra en un filme con Amelia Bence.
La Katherine Hepburn argentina. Ingro, actriz de la época del cine argentino de oro.
A los 99 años murió la actriz Diana Ingro, nombre artístico de Susana Unía. A lo largo de su vida tuvo una extensa trayectoria en cine, teatro y televisión. Nació el 26 de octubre de 1917 y desde muy joven comenzó a transitar diferentes proyectos artísticos.
Trabajó como maestra, se licenció en Letras y egresó del Conservatorio de Arte Dramático. Tuvo una melliza, Sarah, y juntas fueron las menores de cuatro hermanas criadas en Ramos Mejía. Perdió a su padre en su juventud y esa ausencia la marcó considerablemente. “Fue un golpe muy grande, pasé mucho tiempo tratando de encontrarlo -recordó en una entrevista durante los años sesenta- En aquel momento mis hermanas, muy preocupadas por lo que me sucedía, me mandaron a Europa para que me distrajese. Hasta el momento de la pérdida de mi padre tuve una infancia feliz, y pienso que con todo lo que pasé con su muerte se convirtió en una obsesión para mí. Muchas veces sentí miedo de que alguien al lado mío falleciera súbitamente".
Su madre la acompañó en su deseo de convertirse en actriz. Con ella viajaba "desde Ramos hasta el Centro" para realizar sus estudios. “En mi mamá siempre tuve una una gran comprensión”, recordó.
Ingro inició su carrera cinematográfica trabajando como extra en el filme Nuestra Natacha, dirigido por Julio Saraceni, donde compartió elenco junto a Amelia Bence.
En 1947 participó en la película "Corazón", de Carlos Borcosque, basada en la novela "Corazón: Diario de un niño", de Edmondo De Amicis. Algunas de las 30 películas que la tuvieron en su elenco fueron "Corrientes... calle de ensueños", "Sala de guardia", "La pasión desnuda" y "Graciela", producción de Leopoldo Torre Nilsson. Además, la actriz suplantó a Diana Maggi en "La cigarra no es un bicho", filmada en 1963 y dirigida por Daniel Tinayre, elenco que integraron Elsa Daniel, Mirtha Legrand, Malvina Pastorino, José Cibrián, Narciso Ibáñez Menta, Angel Magaña y Luis Sandrini, entre otros.En 1950 por su labor en la película "Con el sudor de tu frente", fue reconocida en el veredicto de la Asociación de Cronistas Cinematográficos como “fascinante revelación” y desde ese momento transitó el reconocimiento en el medio artístico de la época. Se la empezó a llamar, por su cabellera rubia “la Katherine Hepburn argentina”. Pronto arrancaron trabajos en otras películas nacionales, como "Tren internacional", "Muerte civil" y "La telaraña".
En una entrevista que brindó en 1956, su apogeo en la pantalla grande, señaló que “el cine argentino merece nuestra confianza a pesar del juego de intereses que siempre lo rodea. Si hubiera menos miras comerciales y mejor inspiración, se llegaría a la clara conclusión que el mejor negocio es hacer buenas películas, sobre todo, habiendo en nuestro país tanto talento genuino". En ese momento la rodeaban los escritores Nalé Roxlo, Beatriz Guido; y los directores Leopoldo Torre Nilson y Fernando Ayala, entre otros.
Paralelamente a estas participaciones en cine, realizó otras en televisión y teatro. En el escenario algunas de sus primeras obras más prestigiosas fueron versiones de Federico García Lorca y el francés Jean Giraudoux. Con estos espectáculos realizó giras por México, donde también trabajó en televisión junto a Pedro Armendariz. A su regreso a Buenos Aires participó en ciclos televisivos donde interpretaba textos teatrales como "La voz humana", de Jean Cocteau. Sus temporadas teatrales fueron cada vez más reiteradas. Incluso, su pasión por el teatro, la llevó a Estados Unidos en los años '70, cuando realizó para la comunidad hispana de Los Angeles una obra de Julio Mauricio, "La Valija". Por este espectáculo los residentes argentinos en Estados Unidos le brindaron un diploma reconociendo su labor.
Su caudal más intenso de participaciones como actriz fue entre la década del '40 y '60. En televisión también trabajó como conductora en el ciclo "Conflictos humanos". Su despedida en el cine fue en 1999, con la película "Ángel, la diva y yo", de Pablo Nisenson.
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