Estreno: Westworld, la serie que busca reemplazar a Game of Thrones
Cruza de thriller, ciencia ficción y western, Westworld es la nueva gran apuesta de HBO, y promete un mundo intenso y complejo.
- James Marsden y Evan Rachel Wood, en el Lejano Oeste.
Por Marcelo Pavazza
"Los especialistas aseguran que Westworld, que debuta en la pantalla de HBO el domingo 2 de octubre, reemplazará Game of Thrones como la ficción "grande" de la cadena cuando la saga imaginada por George R. R. Martin acabe en 2018. Tiene con qué: protagonizan Anthony Hopkins, Ed Harris, Evan Rachel Wood, James Marsden, Thandie Newton y Rodrigo Santoro; sus creadores son Jonathan Nolan (coguionista de su hermano, Christopher, en la saga Batman) y Lisa Joy; y cuenta además con el influyente J. J. Abrams como uno de los productores ejecutivos. Un trío que ha propuesto de movida un ciclo de cinco temporadas, a menos que el monarca rating diga lo contrario.
Hay más: Westworld es la remake de una película de culto de 1973, escrita y dirigida por Michael Crichton. Los memoriosos de la grilla televisiva argentina de los 80 la recordarán como una fija del ciclo Sábados de Súper Acción, que la exhibía bajo el muy adecuado título de Oestelandia. En ella, y casi dos décadas antes de que Steven Spielberg transformara en (un gran) film su novelaJurassic Park, Crichton daba pruebas de que los parques de diversiones salidos de control eran todo un tema. Ambientada en un futuro lejano, la película contaba la historia de dos amigos que visitaban Delos, un tan sofisticado como decadente sitio de atracciones que a US$ 1.000 por día ofrecía la oportunidad de vivir aventuras en escenarios pretéritos (la Europa del Medioevo, la Roma imperial). Ellos elegían la tercera y más excitante alternativa del paquete: el Lejano Oeste. La interacción con androides fabricados con tecnología de última generación, a los que podían balear a gusto sin sentirse verdaderamente amenazados, le daba al asunto una pátina de realidad que, entrado el film, aumentaba hasta volverse terrorífica. Es que, adelantándose al concepto de "virus" que luego se volvería común con la aparición de las computadoras personales, el software de los robots se alteraba y estos comenzaban a hacer su voluntad, que no siempre era buena. Sobre todo la del pistolero interpretado por Yul Brynner, que terminaba transformándose en el villano de la película.
HBO describe esta nueva versión televisiva (hubo una continuación fílmica y una serie de TV que fracasaron) como "una oscura odisea acerca de los albores de la conciencia artificial y el futuro del pecado". Nolan amplía el concepto: "Quisimos plantear la siguiente cuestión: si una persona tuviera la ocasión de ser completamente sumergida en una fantasía en la que pudiese hacer lo que quisiera, ¿descubriría cosas sobre sí misma que preferiría no saber?". Enunciados e hipótesis que, como se ve, expanden la premisa del film original. Planteada como una cruza de thriller, ciencia ficción y western, Westworld promete un mundo intenso y complejo. Hay violencia, sexo y, como dice Nolan, el planteo de preguntas existenciales que surgen de la posibilidad de satisfacer el más oscuro de los deseos de quienes visitan el parque e interactúan con los robots. Como afirma el periodista Adam Sternbergh en un artículo de la New York Magazine, se trató de reimaginar un film que fue realizado cuando la inteligencia artificial -hoy disponible en cualquier smartphone- no era siquiera una utopía. Gran diferencia: mientras en la película la acción de los científicos se veía atropellada por el desacato de los cyborgs y los dejaba en posición pasiva, aquí la responsabilidad es compartida por los autómatas y sus titiriteros (Anthony Hopkins -ver recuadro- y Jeffrey Wright). Un panorama que se completa con robots que no tienen conciencia de su propia naturaleza (Evan Rachel Wood), villanos temibles (Ed Harris, Rodrigo Santoro) y clientes excitados por el subidón de adrenalina que propone el lugar.
Con su mezcla de parque temático a la Disney y el perturbador Dismaland, montado en 2015 por el street artist británico Banksy, Westworld abre sus puertas para atraer clientes curiosos y espectadores exigentes. Empieza la función.
UN SIR EN LA TV
- El legendario Anthony Hopkins y Jeffrey Wright, villanos.
Muy cerca de los 79 años, y desde hace tiempo en la mesa chica de los grandes actores del último medio siglo, Anthony Hopkins es el nombre máximo del elenco. Interpreta al director creativo, jefe de programación y fundador de Westworld. "De HBO me mandaron el guión y me pareció que interpretar al Doctor Ford era muy complicado. Pero dije que lo haría", cuenta. "Con él es todo en gran escala", explica. "Controla y quiere perfeccionarlo todo. Eso significa que es un loco. Podemos intentar controlar todo, pero el control no existe, esa es la buena noticia. Interpreto personajes extraños que siempre tienen el control. Es lo opuesto a mi naturaleza".
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